Conócenos

Soy Celeste, mamá de Sergio, un valiente bebé prematuro que llegó al mundo con solo 28 semanas de gestación. Durante 38 días, luchamos juntos en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN), viviendo momentos de esperanza y desafíos. Hasta ese 28 de octubre, que Dios llamó a mi hijito al cielo.

 

Ese tiempo en la UCIN me mostró una realidad que antes desconocía: la vulnerabilidad de los bebés prematuros y el dolor profundo de sus familias. En medio de la tristeza, nació en mí el deseo de transformar el amor infinito que siento por mi hijo en algo que pudiera ayudar a otros.

 

Así nació Pulpitos de Amor. A través del tejido de pequeños pulpos de crochet, brindamos a los bebés prematuros un objeto de confort y seguridad en sus incubadoras, y a sus familias, un símbolo de apoyo y compañía en esta difícil etapa. Lo que comenzó como un gesto para otros, se ha convertido en un refugio para mi propio corazón, una manera de sanar y dar sentido a todo el amor que físicamente ya no puedo entregarle a Sergio.

 

Cada pulpito es tejido con amor, esperanza y el deseo de que ningún bebé, ni su familia se sientan solos en este camino.

 

¡Gracias por estar aquí y ser parte de esta misión que el cielo me ha encomendado!